martes, 7 de febrero de 2012

ROMANCE DE SOR PAZ INFINITA

--La verdad, Eloy, es que la historia, en brevedad rimada, resulta un poco carnicera y explica un tanto nuestra forma de ser.
--Sí, Gaudioso, al final, tenemos que reconocer que los españoles somos mestizos de distintas razas y llevamos en las venas un cóctel explosivo de genes variados y diversos; pero con las mismas virtudes y defectos que cualquier otra raza que se precie. En este variado mundo todos somos mestizos a estas alturas de la evolución histórica de la humanidad.
--Bueno, todos, lo que se dice todos, pues no.
--¿Piensas que puede haber algún esquimal remoto y puro? ¿Alguna tribu, perdida en las selvas amazónicas, con genes incontaminados?
--No, Eloy, incluso esos seres humanos (y seras humanas, según las Sras. Pajina y Aído, que todo hay que decirlo para evitar suspicacias machistas cuando en España mandan los socialistas; ahora, ya no) descienden de otros ancestros y han llegado a establecerse en esos lugares recónditos por alguna razón y porque son móviles; disponen de articulaciones y posibilidad de desplazamiento. El ser humano no surge, en ningún lugar, por generación espontánea. Vete tú a saber quienes fueron los ancestros de esos remotos.
--¿Entonces, a quién te refieres?
--Me refiero a esos seres humanos de sesera txapelada, cuyos ancestros se limpiaban el culo con hierbas aromáticas, en contraposición con los del resto de la península que realizaban este menester con un canto rodado y simple pedrusco. Según Sabino Arana, son los únicos puros en el universo mundo y alrededores, más o menos próximos y lejanísimos.
--Mira, Gaudioso, te he repetido muchas veces que los árboles se conocen por los frutos. Sabino no dio más que bellotas, ergo puto alcornoque.
--A mí, Eloy, no me extraña que Sabino pensase lo que se le ocurriese debajo de la txapela, porque era un mastuerzo. Lo que me extraña es que haya tantos mastuerzos posteriores que mantengan la misma triste filosofía y, encima, sean capaces de matar inocentes a sangre fría por esa ridícula razón.
--Ten en cuenta, Gaudioso, que, cada día, un montón de madres paren hijos idiotas; parece que se pusiesen de acuerdo.
-- Ahora aquí se pare menos por la Ley de Aborto de la ilustre Aído; pero lo que es idiotas, se siguen pariendo. A lo mejor, lo que son genios, se paren menos. ¡Vete a saber!
--Bueno, de los puros hablaremos otro día. Al principio, me decías que la Historia…
--¡Ah, sí! La historia de los pueblos viene a ser lo mismo que el cuaderno de bitácora de un matadero municipal.
--Algo así, Gaudioso; pero aquí, afortunadamente, desde que ZP, el pacificador, se hizo cargo del Gobierno, la posibilidad de las guerras dio su último estertor y estiró la pata definitivamente. Lo consiguió con la retirada de las tropas de Irak, la Alianza de las Civilizaciones y el nombramiento de Carme Chacón como Ministra de Defensa y de las Fuerzas Armadas.
--¿Por qué nombraría a Carme Chacón Ministra de Defensa?
--Porque en el Ministerio (absurdo) de la Vivienda no hacía nada; no puso ni un solo ladrillo.
--¿Entonces, quería ponerla a trabajar?
--En realidad se juntaron dos circunstancias para el cambio del Ministerio: por una parte (se filtró en su día) los etarras, que negociaban con Eguiguren y los “nardos”, exigieron la destitución de Fungairiño, Fiscal que les traía a mal traer, y el Ministro de Defensa, José Bono, porque iba a misa y ellos no lo veían con buenos ojos.
--Van cuadrándome las cosas, Eloy. Entonces el “ojos glaucos y cejas circunflejas” miró al Ministerio de Vivienda, vio a la Carmen que entretenía su embarazo haciendo ganchillo y se dijo: “¡La bomba! ¡La admiración de los mundos! ¡Preñada al frente de los ejércitos! ¡Qué notición!”.
--A lo mejor, se lo aconsejó el tal Barroso, Consejero de Presidencia y esposo de la interfecta.
--Sea como sea, Eloy, la verdad es que la embarazada enmudeció las guerras y se acabaron las manifestaciones de cine flautas de la ceja, perro flautas, sindicatos y gentes de diversos pelajes por motivos bélicos no queridos.
-- Esa es la realidad, Gaudioso; tenemos que admitirlo.

ROMANCE DE SOR PAZ INFINITA

Pero llegó Zapatero
a gobernar esta patria
(unas veces discutible
y discutida, otras tantas)
con unas ansias de paaazzz
que conmueve las entrañas
y propuso, entre culturas,
variopintas, varioácratras,
reunir civilizaciones
en una “santa alianza”.
Un buen día Zapatero
a Carmen Chacón armaba
para que cambiase guerras
por obras humanitarias.
Carme pasó por Vivienda
sin romperla ni mancharla.
Por su voto de obediencia
tomó las Fuerzas Armadas.
Sor Carme Paz Infinita,
Sor Chacón de Paz Ansiada.
Prohibió la bomba racimo
por ser bomba desalmada
y rellenó de confetis
y caramelos de nata
las que le vendió a Gadafi
por ser puñetero sátrapa.
Mandó a la tropa española,
que en Afganistán bregaba,
fusiles de chocolate
que balas de anís disparan;
los obuses de los tanques
son sabrosas mantecadas;
nuestros F diez y ocho
tienen de azúcar sus alas
y dibujan sobre el cielo,
tan solo, palomas blancas;
mientras, ceban los delfines
por el mar nuestras fragatas
cuyos cañones, por cierto,
sólo tiran empanadas
a ésos, que secuestran barcos
y que llamamos piratas;
los dineros de rescates
nos los ahorramos en balas.
Entra en la Guerra de Libia
en noble cuatrialianza;
mas, no autoriza misiles,
ni las bombas, ni las balas;
pasteles para las tropas,
para Gadafi, una tarta
con sus cuarenta velitas
por años que el moro manda.
Son las guerras de Sor Carme:
misiones humanitarias.
Sólo los nuestros se mueren;
sólo los contrarios matan.
Las tropas deben lavarles
y plancharles las chilabas;
manda a La Legión no luchen
y que cuiden de la cabra
para que aporte la leche
que necesita la infancia.
Es, tan solo, Sor Chacón
una monja mojigata:
como Ministra, un coñazo;
como aspirante, una gaita.
Así se pasan los días,
años, meses y semanas
jugando a las guerras mudas,
sin decir unas palabras
sobre el éxito logrado
o si hay hostias a manta.
Si no fuera tan atea,
posible beatificarla.

(Madrid, 5 de Noviembre de 2011)

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