lunes, 26 de diciembre de 2011

ROMANCE DE "ERES" Y MARISCO

ROMANCE DE “ERES” Y MARISCO

Ahora se empieza a saber
( alguien levantó la manta )
que esa tierra andaluza
no es la Arcadia, es la Jauja
donde sobran los chorizos:
Se atan perros, jacos, jacas,
se atan rebaños enteros
de ovejas, toros y vacas;
se atan “eres” y subsidios,
formación hacia la nada,
prejubilaciones chollo,
indemnizaciones gansas
sin necesidad del curro
en empresas afectadas.
Basta con que sea esposa,
madre, cuñado, cuñada,
compañero de Partido,
o que sea camarada
de UGT en el sindicato,
o hijo de una prima hermana
para coger una bolsa
de miles de euros preñada.
Sólo con tus relaciones
tienes vida asegurada.
Tomas la niña de Chaves,
en tu Empresa la contratas,
la metes en Dirección
y te cae la pasta gansa
en diluvio de millones
cual gota fría de agua.
Preocupación de un buen padre
desvelado por su vástaga
que la quiere ver segura
y fuertemente becada.

Fueron llegando en cuadrillas
las criaturitas paradas
y eligieron de asesor
al sindicalista Lanza
quien, por una comisión,
les metía, de parranda,
en “eres”, jubilaciones
y en las pensiones bastardas
que aseguraban sus vidas
hasta el día de la Parca.
Y ya, metido en harina,
siendo tanta la abundancia,
Lanza se metió en los “eres”
con esposa y dos cuñadas;
al fin y al cabo, era un Midas
quien repartía la pasta.

Para celebrar el chollo
se fueron de mariscada
Antonio Rodri Torrijos,
progresista, como Lanza,
con el Mellet a Bruselas
y con las cuentas pagadas
por la Empresa del tercero
que desbordaba ganancias.
Centollos y bogavantes,
las quisquillas, a mansalva,
almejas, ostras, percebes,
nécoras, gambas, cigalas
y unas langostas en flor
por capricho de las ganas.
Con las sobras del menú
hartara el Barrio de Triana
las Fiestas de Navidad
y la Feria Sevillana.
Son novelas de aventuras
que lee la Juez Alaya,
por si es justicia imprimirlas,
por si es justicia editarlas,
por si guardar los chorizos
y dejar libres las cabras,
recuperando los euros
que se dieron, como gracia,
por gestores andaluces
con la honradez muy mermada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario