Por fin acude
Artur Mas,
tras meses de
resistencia,
ante esa Comisión
que requiere su
presencia
para que dé
explicaciones
sobre cosas muy
concretas.
¿Qué sabe de los
Pujoles,
de Andorra y de
la herencia,
de comisiones
por obras
y de todas esas
cuentas
que han dado la
vuelta al mundo
por muy extrañas
veredas?
¿Qué chanchullos
realizó,
a la espalda de
Junqueras,
con su hermano político:
deslocalizar
empresas
que, hartas de
Cataluña
y políticas
inciertas,
fueron a un
lugar estable
a dar trabajos y
rentas?
¿Qué sabe de ITV,
enjuagues y
componendas
para montarse un
buen chollo
y forrar la
faltriquera?
--“Parece que
Oriol Pujol,
hermano de
cabecera,
vino a resultar
pillín
y a mí me implicó
en sus tretas”--.
Acude Arturo Mas
forrado de
desvergüenza,
con sonrisa angelical,
su corbata y su
chaqueta,
con su cara de
granito
y propicio a
hacer gracietas.
Como es hombre
prepotente
y Honorable de excelencia,
dejó verdades en
casa,
lo mismo que la
vergüenza,
honradez en el
decir,
memoria y
transparencia;
porque… ¿Qué
coño le importa
a nadie lo que
supiera?
La Comisión era
mixta
y conclusiones
inciertas,
como han
resultado todas
desque mi
memoria cuenta;
como aquella de
los ERE
donde Griñán se
presenta,
muy cargado de
ignorancia
y la culpa en
excedencia,
saliendo
santificado
cual Catalina de
Siena:
impoluto,
deslumbrante
y una sonrisa
serena,
ya que eran
mayoría
diputados de su
cuerda.
Lo mismo que
Manuel Chaves
y su ignorancia
concreta
sobre las acciones
turbias,
durante su
presidencia,
del desfalco de
los ERE.
Dijo que… --“Tres
sinvergüenzas,
que se saltaron
sus normas,
le desfalcaron
su Hacienda”--.
¿Qué solo eran
tres o cuatro
y van doscientos
cincuenta?
Al ser más los
progresistas,
le bañaron de
inocencia
y regresó al
Ministerio,
aforado, en
consecuencia.
Hoy frente a
otra Comisión
está el socio de
Junqueras;
los Diputados
preguntan
y él responde a
su manera.
--“Tuvo cargos
muy importantes
durante su
presidencia.
¿Por qué su
padre político
quedó exento de
conciencia?”--.
--“Siempre
estuve de pegado
a la propia
riñonera
del Honorable
Pujol”--.
--“¿Ni siquiera
se dio cuenta
que transportaba
millones
cual gavillas a
la era?”--.
--“Puede que
oyese rumores,
pero nunca tuve
pruebas”--.
--“¿No es
extraño que seis miembros,
casi la familia
entera,
tuviesen
contrataciones
para cosas muy
diversas,
que hacían o no
hacían,
y pagaba nuestra
Hacienda?”--.
--“Es que hay
ciertas personas
con vocacional
querencia
a trabajar por
lo público
y obran en
consecuencia”--.
--“Sobre los
Parque Eólicos
que a los
Sumarroca afectan…
¿Qué nos tiene
que decir?”--.
--“A eso no
tengo respuesta”--.
--“Jordi Pujol
declaró
que tenía
cuentas secretas
en cierto banco
andorrano
como fruto de
una herencia
y tuvo cuarenta
años
sin notificar a
Hacienda.
Usted, que
estuvo a él pegado,
¿nos dará alguna
respuesta?”--.
--“Sí, son cosas
de familia
que a política
no afectan;
son cosas de
intimidad
y yo no sé nada
de ellas”--.
--“Parece que
del Palau
sí mamaba
Convergencia”--.
--“Pues yo hablé
con Félix Millet;
dice que ni se
dio cuenta”--.
Así, entre
muchas preguntas,
le preguntó
Albert Rivera:
--“Es difícil
comprender
que Usted, con
su inteligencia,
de cómo chupaba
el Clan
no tuviese zorra
idea.
¿No le extrañó
tanto lujo,
tanto coche y
tanta hacienda?”--.
--“Yo apenas, si
me fijaba,
ya que, por
aquellas fechas,
unas veces, iba
a Babia
y empadroné en
las Batuecas”--.
--“Buenos sitios
pal relax”--.
Le comentó
Albert Rivera.
Así pasaron las
horas
sin que Mas
soltase prenda:
de unas cosas,
no sabía;
de otras, ni se
dio cuenta
y remató la
jugada
con una tonta
gracieta:
--“Yo de Pujol
no sé nada;
no tengo ni puta
idea”--.
(Madrid, 17 de Febrero de 2015)
Genial....
ResponderEliminarCuanto hecho de menos tu romance con el Puigdemont como cabecera que tantísimo glamour esta dando a todas las secesionistas faltriqueras. D.E.P.
ResponderEliminar