lunes, 23 de septiembre de 2013

ROMANCE DEL JUSTICIERO



La Providencia es espléndida;
la Providencia es magnánima;
la Providencia es la leche
y, algunas veces, se pasa,
pues regala a Andalucía
así sin más, por la cara,
un “ente” excepcional
con inteligencia máxima,
con condura a toda prueba,
con honradez contrastada.
Se declara “no chorizo”
y, cuando dice palabra,
su palabra se va a misa
como, el Domingo, Pascasia.
Este “ente” extraordinario
que Providencia donara
al Pueblo de Andalucía,
Diego Valderas se llama
y hoy es Vicepresidente
de la Junta Sevillana;
pues apoyó con sus votos
a un notable tarambana
que, en breve, será imputado,
por su salero y andanzas,
por una Juez menudita
conocida por Alaya.
Cuando entró Diego Valderas
en la Junta Sevillana,
introdujo por la fuerza,
o séase, por las bravas,
la transparencia total,
dado que, allí, era escasa.
Cuando hacía oposición,
desde honradez, proclamaba
una guerra sin cuartel
al que a Andalucía robara:
--“La Justicia ha de ser justa;
aquí, quien la hace la paga
y, si Guerrero robó
y se enriqueció Juan Lanzas
usando Erario andaluz,
deben pagar sus mangancias
con treinta años de cárcel
que es el máximo en España;
Andalucía es muy pobre;
tiene parados, a manta,
hurgando entre las basuras
por llevar algo a la panza”.--
La cosa estaba que ardía;
toda Andalucía en llamas
y él entraba de bombero
para regar con la manga;
la manga es Izquierda Unida.
(vera honradez, demostrada)
y, él, dirigía a lo recto
según su concia clara.
Después vinieron las urnas
donde Valderas sacaba
los sufragios suficientes
que Griñán necesitaba
para dejar sin Gobierno
a la Derecha nefasta.
Cuando se formó el Gobierno,
la cosa quedó más clara;
tomo Vice Presidencia,
pues Griñán le regalaba
un asiento a su derecha
para que le asesorara
y vino a brotar la luz
en la Junta Sevillana.
El Justiciero Valderas
va mudando su palabra
según da más chupetones
en la ubre de la vaca.
--“ Sí que está rica esta leche;
yo ni me lo imaginaba”.--
Chupetón a chupetón,
el Justiciero se clara
las ideas que tenía
cuando a Griñán criticaba
y ve las cosas distintas
con claridad meridiana.
--“Toda la culpa la tiene
la Juez Mercedes Alaya;
no para de hurgar papeles;
no cesa en levantar mantas
y le imputa a todo cristo
que por su juzgado pasa.
La verdad, es que se pasa
y se toma atribuciones
en cosas que sobrepasan
la justicia establecida
por la Junta Sevillana.
¿Es que no va a parar nunca
de tirar de tanta manta?
Le exijo a la Juez Mercedes
que venga a “pasar página”,
pues ya tiene suficientes;
y deje de dar la lata”.--
Le pregunta un periodista,
con memoria, que pasaba
por la puerta de San Telmo
cuando Valderas cruzaba:
--“Perdone, Señor Valderas.
¿No era usted quien acusaba
a Griñán y a su Gobierno
de los robos y mangancias?
¿No pedía la dimisión
de Griñán, cada jornada?
¿Por qué cambia de opinión
y ahora la culpa traslada,
hoy, sin pizca de vergüenza,
a Merceditas Alaya?”.--
--“Hoy tengo visión distinta;
veo las cosas más claras
y pongo mano en el fuego
por este amigo del alma,
con quien comparto el poder
por su honradez demostrada;
si no… ¿Estaría yo aquí
mamando de misma vaca?
Muy poca vergüenza tiene
la Juez Mercedes Alaya
al pretender imputar
a un hombre de tanta talla,
como es Antonio Griñán,
honrado, donde los haya”.—
Justiciero y transformista,
donde declaraba “digo”,
hoy con “diego” se despacha
sin sufrir rubor alguno
en su granítica cara.
Son cosas de progresistas
que en el progreso se amparan
para asumir su verdad
y el “derecho de pernada”.
--“La cuestión es cojonuda;
mas, se ha de “pasar la página”
que está toda Andalucía
de ERES hasta las cachas.
Con más de cien imputados…
¿La Mercedes no está harta?
Si es que tiene mala leche
y nos la tiene jurada.
¿Es esto hacer justicia,
o es asunto de venganza?
Si quería la Presidencia
que por las urnas pasara;
que no venga con enredos
ni venga con zarandajas.
Esta mujer, se lo juro,
es una mujer sin alma;
solo destila rencor
que con justicia reemplaza”.—
Así hablaba el Justiciero
y justicia reclamaba
sin vergüenza ni pudor
en su granítica cara.


     (Calpe, 22 de Septiembre de 2013)

3 comentarios:

  1. Mira Eloy, yo con estas cosas flipo en colores, cuando pienso que no es posible que haya más, pues....Hay y hay, y van saliendo cosas, pero lo que me alucina (sin alucinógenos añadidos), es la capacidad y el arte para cambiar de chaqueta, de pensamiento, de ideales incluso y si me apuras, (si alguna vez tuvieron otros que no fueran chupar del bote ajeno) y los alegatos tan bien elaborados, son tan buenos actores, que creo que incluso acaban creyéndose sus propias mentiras, de tan integrados o entregados que están en sus papeles. A ver lo que dura la jueza, pues ya les está incordiando demasiado, así que no me extrañaría que tramaran alguna de más gorda aún.

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  2. El problema de los partidos es que desde el principio de la Democracia se han creado tantos poderes y privilegios; que se creen intocables; no es solo eso, es que han montado el tinglado para serlo (el aforamiento) Cuando en los tiempos de González y Guerra mataron la independencia judicial; fue para mantener su culo a resguardo en caso de necesidad y, de paso, a todos los colegas, por aquello de que hoy por mi y mañana por ti; según las urnas. ¿Recuerdas el infierno que le hicieron pasar al pobre Juez Barbero (Otro Alaya) por meterse a desentrañar el caso Filesa. Aída (secretaria de Alfonso Guerra y recaudadora de muchos millones de pesetas ilegales para financiar al PSOE y a ella misma (otra Barcenas, pero que metía millones en las arcas del PSOE, en lugar de sacar millones de euros de la Caja del Partido) El juez Barbero terminó muy mal, enfermo, decrépito hasta que vino a morir, prácticamente olvidado. Los políticos, cuando un juez se mete con ellos y puede trincarles por los mismísimos; son muy vengativos y tienen demasiada mala leche. Yo lo veo así.

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  3. El problema de los partidos es que desde el principio de la Democracia se han creado tantos poderes y privilegios; que se creen intocables; no es solo eso, es que han montado el tinglado para serlo (el aforamiento) Cuando en los tiempos de González y Guerra mataron la independencia judicial; fue para mantener su culo a resguardo en caso de necesidad y, de paso, a todos los colegas, por aquello de que hoy por mi y mañana por ti; según las urnas. ¿Recuerdas el infierno que le hicieron pasar al pobre Juez Barbero (Otro Alaya) por meterse a desentrañar el caso Filesa. Aída (secretaria de Alfonso Guerra y recaudadora de muchos millones de pesetas ilegales para financiar al PSOE y a ella misma (otra Barcenas, pero que metía millones en las arcas del PSOE, en lugar de sacar millones de euros de la Caja del Partido) El juez Barbero terminó muy mal, enfermo, decrépito hasta que vino a morir, prácticamente olvidado. Los políticos, cuando un juez se mete con ellos y puede trincarles por los mismísimos; son muy vengativos y tienen demasiada mala leche. Yo lo veo así.

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