martes, 8 de mayo de 2012

ROMANCE DE UN MITINERO

ROMANCE DE UN MITINERO

Hace un año, Manuel Chaves, Vicepresidente Tercero (o cuarto, vete a saber, que también estaban en el cargo Dogoberto Méndez y Alanotoxo) se adelantó a la Campaña Electoral para presumir de cargo y exponer sus innumerables logros, como Socialista de Pro desde la tortilla de Suresnes, (fue el causante de que faltase tortilla y sobrasen chorizos): como Ministro de Trabajo con “El Gran Felipe”, (se cerraron las oficinas del Inem, por falta de parados); Presidente de Andalucía (la colocó a nivel socioeconómico de Luxemburgo y los alumnos consiguieron 17 Premios Nobel y las Oficinas del Inem criaban cardos borriqueros por falta del pisoteo de parados). Incluso, antes de, como facha falangista de postín (uno de los pocos que cantaba el “Cara al Sol” con “tono agerridobaritonosoantievolutivofluctuante” en Sol Mayor, con Fa sostenido que era lo suyo, (característica muy apreciada, por los Mandos del Régimen, por lo escasa, en aquellos tiempos de escaseces generales; tiempos jodidos, aquellos, donde sólo comían y jugaban con cierta decencia los portadores de cinco flechas sobre yugo, bordadas en rojo sobre el bolsillo de una camisa azul)) Lo que son los progresos conseguidos: Hoy, sin ir más lejos, apareces con una de aquellas camisas en una de las numerosísimas manifestaciones socialistasindicales y Cayo Lara te quema en la Puerta del Sol, sin necesidad de “Auto de Fe” o monsergas similares. Escuchemos al Maestro.

Se levantó Manuel Chaves,
tras consultar con la almohada,
y con un par de cojó…
se metió en la precampaña.
No me fijé dónde ha sido
el mitin de esta mañana,
ni si había mucha gente
o si vacío en las gradas.
Le vi por Televisión;
que apareció en la pantalla
cuando tomaba los postres
y ya el café humeaba.
Tiene la cara muy dura,
tiene la cara muy ancha
y, aunque el grana no aparece,
por más que motivos haya,
yo la asocié, desde siempre,
con el escudo del Barça:
una cara furibunda
fue la que vi en la pantalla,
riñendo a los españoles
que, al final de la campaña,
quieran votar al PP
que no inspira confianza.
--“Si a Rajoy nadie le quiere,
es un falso, es un manta”.--
Chaves, en mi televisor,
más que disertar, bramaba:
--“Hoy parece obligatorio
votar al PP en España.
¡No es obligatorio, no!
Estamos en democracia
y todos deben votar,
mis queridos camaradas,
a las siglas del progreso
que han traído la abundancia
y la honradez de gestión
a los rincones de España”.--
¿Dijo rincón o trincón?
No entendí bien la palabra.
--“Rajoy hace travestismo
porque ahora esconde la cara
por lo que ocurre en Japón
cuando, hasta ayer, apostaba
por centrales nucleares
que ahora esconde en su programa”.--
Poco le ha faltado, a Chaves,
decir en esta proclama
lo mismo que Pedro Castro
en época no lejana:
--“eran tontos de cojones
los que al PP votaban”.--
No escuché el discurso entero,
sólo reseña abreviada.
No se si habló de progresos
de la “Andaluza Lozana”,
que la casó veinte años
y la dejó bien preñada.
Ahora se ha puesto de parto
y alumbra ERES a manta;
como si fuera coneja
y gazapos las camadas:
los hay blancos, los hay negros,
los hay tintos y con manchas,
y, hasta hay gazapos verdes
que son raros en su raza;
pero gazapo es error,
como gazapa es errata,
y culpa a la transcripción
del concepto en la palabra.
Se pretendía ayudar
a criaturas inválidas
que carecen de posibles
para pasar crisis tanta.
La caridad es virtud
que está bien recomendada
cuando unos tienen penuria
y otros sobran de abundancia.
Ahora, que empieza el declive
con divorcio de Lozana,
quiere dejar los gazapos
ocultos bajo la manta,
como estuvieron los años
de su fértil gobernanza
y repudia a los gazapos
intrusos en las camadas.
Tres o cuatro, dijo Chaves,
cuando contestó en la Cámara
y son ya ciento setenta
los que salen de la manta.
“Bien pudo Chaves hablar
de una Andalucía sana:
sin crisis, deuda ni paro
y rebosando las arcas.
La penuria ya se extingue
que nadando en la abundancia
dejó a gentes del Partido
y al sindicalista Lanza.
Gente que, en la dictadura,
iba a trancas y barrancas,
vendiendo Biblias a plazos,
llamando, casa por casa,
ahora conduce Mercedes
y tiene chalé en la playa;
lo ganó sin interés,
el café lo regalaba.
El cuñado de un amigo
también, como ejemplo valga,
puso cables en Moncloa
y alumbró otra comarca
con caserío, piscina,
con helipuerto y potrancas
correteando en los prados
y durmiendo en buenas cuadras.
Él cobró la deuda histórica,
Deuda que nadie pagara,
la que dejó Boabdil
cuando se fue de Granada:
“renta de ochocientos años,
facturas de antorchas y agua,
las obras del Albaicín
e hipoteca de la Alambra,
forraje de los caballos
y alquiler de cimitarras”;
esta deuda, más que histórica,
era una deuda arcana.
Zapatero las pagó,
que estaban justificadas
en los Códices de entonces
y él empeñó su palabra.
Pudo así Monteserrín
pagar las facturas falsas
de obras que nunca se hicieron,
ni en Macarena, ni en Triana.
--“¿Qué hubo mangoneo y trinque?
Lo siento, yo no sé nada
que gobernaba en Sevilla
pero empadronado en Babia”.--
Bien pudo Chaves decir
en mitin de precampaña.

(Madrid, 22 de Marzo de 2011)

No hay comentarios:

Publicar un comentario