lunes, 5 de marzo de 2012

ROMANCE DE "INVICTUS"

ROMANCE DE INVICTUS

Invictus ha regresado, ha ganado, con el 59,22 % de los votos, la Secretaría General de PSOE de Madrid. Nombra una Ejecutiva de 50 componentes con un espíritu integrador verdaderamente ejemplar, incluye a tres del 40,78 % de la oposición que no le votó. Un “Invictus con derecho de pernada”. Recordamos el romance sobre el gran “cartelón publicitario” de las elecciones a la Presidencia de la Comunidad de 25M. Toda una premonición.



La luna baja a Madrid
con su polisón de nardos;
el Gómez la mira, mira,
el Gómez la está mirando.
--Dime, luna, luna, luna.
¿Para quién es el caballo
que cabalga, blandamente,
bajo el polisón de nardos?
--Es el caballo Babieco
que en las Babias fue criado,
de la estirpe de Babieca
que al Cid fuera regalado.
Desciende de misma sangre
y pastó los mismos prados.
Negra cascada sus crines,
negra cascada su rabo,
a lomos del negro lomo
tienes triunfo asegurado.
Desde hoy, serás “Invictus”,
ya que el título has ganado
luchando como un buen líder,
ganando en todos los campos,
tanto del partido propio
como del bando contrario.
Invictus en el palenque
lanza en ristre peleando,
Invictus con el mandoble
manejado con dos manos,
Invictus con hacha y maza,
Invictus con flecha y dardo,
Invictus sobre la arena,
Invictus en el tablado,
Invictus, también, en mítines,
Invictus en el estrado,
Invictus con Zapatero
(Presidente inusitado)
Invictus contra Jiménez
que fue china en el zapato.
(endilgo del Presidente
que estaba muy cabreado
por negarle la obediencia
que antes le habías jurado).
Invictus en toda lid,
Invictus como pazguato”.

Esto le dijo la luna
con su polisón de nardos;
el momento era propicio
y la ocasión pintó en calvo.
La luna, del cinturón,
trae la Tizona colgando
y una rodela de cuero,
con crucero trebolado,
le dona como defensa
para la lluvia de dardos
que ha de lanzarle la Aguirre
con su verbo envenenado.
Conseguirá en los Comicios
un triunfo mayoritario.
Tomás Gómez será Invictus,
tanto a pie, como a caballo.
Sobre el lago del Retiro
riela un rayo plateado.
Otro rayo, inquisitivo;
hasta Parla va rielando;
atravesó los cristales,
sin romperlos ni mancharlos,
y hurgó, bajo las alfombras,
los efectos impagados:
doscientos cuarenta kilos,
que no son moco de pavo,
entre facturas pendientes
y pagarés no abonados,
que Gómez dejara ocultos
y descubrió el puto rayo.
ZP le dio el Partido
con cargo de Secretario
y dejó el Ayuntamiento
completamente arruinado:
un déficit cojonudo
y alguien tendrá que pagarlo.
Se deben veinte millones
a ese tranvía “estrellado”
que trae una renta impuesta
de diez millones por año.
Otra obra, singular,
fue la emisora de radio
que sigue costando un pico
aunque nunca haya radiado.
Ahora tendrá que pagar
quien heredó el embolado.
Genialidades de Invictus
que en los dos últimos años
no presentó cuenta alguna
a Fiscalía de Estado;
todo bajo las alfombras,
oculto y a buen recaudo;
ya llegará el tonto útil
que habrá de justificarlo.
¡Qué cosas se fue a encontrar
aquel puñetero rayo
hurgando bajo la alfombra
a la que llegó, rielando!
Invictus critica ahora
gritando en tono muy alto:
“¿Porqué Esperanza presume
de un metro, casi acabado,
si el suburbano dichoso
no ha llegado hasta Buitrago?
En eso, de echarse flores,
Aguirre se está pasando”.
Invictus a Presidencia;
Invictus al estrellato,
relincha el negro Babieco
en la lógica piafando.
La luna vino a Madrid
con su polisón de nardos.
Trajo un Invictus cerril,
trajo un Invictus petardo
que, si el día veintidós,
este veintidós de Mayo,
explosiona presidencia
con el recuento cerrado,
tendrá el pueblo de Madrid
un Presidente pazguato;
lo mismo tiene Moncloa
y, ya ves, vamos tirando
hasta el nivel de pobreza
y un enjambre de parados
que libarán en las flores
porque el alimento es caro.
El día de los Comicios,
con el recuento cerrado,
Invictus mutará en Victus
un tanto desmejorado;
la luna volverá al cielo
con su polisón de nardos
y Babieco y Tomás Gómez
irán a pacer los pastos
de las montañas de Babia
y el cuento se habrá acabado.
Aguirre seguirá en Sol,
por lo menos, cuatro años

(Madrid, 18 de Abril de 2011)

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